El presidente del Consejo de Dirección de la SGAE, Eduardo Bautista, abogó ayer en Barcelona para que las compañías de telefonía que operan en España paguen una «tarifa inteligente, que no sea obstáculo para el desarrollo de su negocio» por los derechos de autor, como ya ocurre en otros países de Europa.
Bautista, junto con el presidente de la SGAE, José Luis Borau, y el director de la Sociedad en la Zona Mediterránea, Ramon Muntaner, presentó en la Ciudad Condal el balance de gestión de la institución en 2008, en el que destaca una caída del 11,5 por ciento de los ingresos sociales como consecuencia de la crisis económica, que han pasado de los 377 millones de euros en 2007 a 333,9 millones en 2008.
Jueces, policías y maestros
Como ya ha hecho en otras ocasiones, Eduardo Bautista ha cargado contra los operarios de telefonía, que «hacen un enorme negocio con la distribución de datos» y se ha mostrado a favor de convocar, tutelada por el Gobierno, una «mesa de concertación» con todas las partes «de la cadena del valor añadido» para intentar encontrar una solución a las descargas por internet. «La desconexión debe ser el último recurso», ha apostillado. A juicio del directivo de la SGAE, todas las cosas tienen un precio y «si el público, al final, demanda cultura gratis deberá ser el Estado quien la pague, como ya hace con los jueces, los policías o los maestros».
Asimismo, ha incidido en que quien debe «asumir la responsabilidad de que los críos respeten la propiedad intelectual son los gobiernos, de la misma forma que se nos dice desde muy pequeños que no se puede robar», y ha agregado que el «autor tiene derecho a ser reconocido como propietario de su obra».
Por otra parte, ha resaltado que la SGAE «no está aquí para ser simpática sino eficiente» y ha lamentado que la clase política haya «sucumbido extrañamente al clamor de la llamada democracia digital», informa Efe
Respecto de la nueva ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, Bautista ha dicho que es una mujer «prudente, estudiosa y que va a analizar la situación con inteligencia, en la misma línea que César Antonio Molina, de defensa de la propiedad intelectual».
Precisamente, ha tenido muy buenas palabras para Molina, «el primero que dijo que hay que defender a los creadores porque la imagen de marca de un país tiene que ver con la cultura que genera».