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Dos muertos y más de cien heridos en los enfrentamientos en las calles de Bangkok

El Ejército responde con disparos el ataque de los manifestantes / Reuters

La magnitud de las revueltas en las calles de Bangkok se contabiliza en el número de muertos, dos, y el de heridos, más de cien. La violencia está instalada en las calles entre los seguidores del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, los llamados 'camisas rojas', y los residentes de la capital.

Pese a que siguen los choques, el primer ministro, Abhisit Vejjajiva, ha anunciado en una declaración por televisión que la situación estaba bajo control, excepto por la concentración antigubernamental que se reunió a las afueras de la Casa del Gobierno. Aun así, ha advertido de que pueden producirse episodios de violencia contra la propiedad pública, contra establecimientos clave o contra lugares públicos. Por este motivo, el Gobierno ha dado instrucciones a las autoridades para que estén preparadas ante cualquier incidente, y para que las unidades móviles respondan rápidamente ante cualquier situación.

El jefe de Gabinete, Satit Wongnongtoey, ha explicado que un hombre ha muerto por heridas de bala durante un enfrentamiento. El fallecido, de 54 años, se encontraba en el bando de los residentes, que se enfrentaron a los manifestantes, antes de que éstos abriesen fuego contra ellos e hiriesen además a otras dos personas. Poco después, un hospital privado informaba de que un joven de 19 años también había muerto por heridas de bala y que otros cinco se encontraban heridos. La última cifra de heridos por las manifestaciones se sitúa además en 113, entre ellos varios soldados.

El Gobierno se reafirma en el poder

El primer ministro tailandés se ha rodeado de su cúpula de Gobierno, líderes militares y de la Policía para aparecer en la televisión y cortar de raíz las insistentes especulaciones en torno a su posible pérdida de apoyo de las Fuerzas de Seguridad.

Abhisit ha insistido en que el Gobierno confía en que la situación mejorará en los próximos días. El primer ministro ha prometido no dar su brazo a torcer ante la demanda de dimisión solicitada por los 'camisas rojas', nombre que reciben los seguidores del ex primer ministro exiliado Thaksin Shinawatra, y ha expresado su confianza en que las Fuerzas de Seguridad se mantengan firmes junto a él.

El Gobierno de Tailandia mantiene decretado el estado de excepción en Bangkok y en los alrededores de la capital después de que las protestas antigubernamentales obligaran a suspender el sábado la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).

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