La jornada de huelga de los jueces ha dejado más de una anécdota en salas y recintos judiciales de todo el país. Más de un indignado porque la huelga le ha plantado en una cola para que luego su caso no se resolviese, o como en Madrid, donde un abogado se quejaba a las puertas de los Juzgados de Puerta del Castilla de que el paro de un día se convertiría en una demora hasta abril del caso que tenía entre manos.

Más grave ha sido el caso vivido en Granada, donde un hombre ha sido detenido cuando pretendía agredir, en los Juzgados de Plaza Nueva de la ciudad, a una juez con un cuchillo de grandes dimensiones. El caso se ha producido cuando los camareros de la terraza en la que se encontraba el sujeto alertaron de que éste «iba a matar a la juez» que le habría llevado varias causas. Como en la zona se encontraban varios jueces que acababan de participar en la concentración en protesta por la falta de medios en la Justicia, fueron el juez decano de Granada, Antonio Moreno, y un compañero quienes se acercaron al hombre para convencerlo de que abandonara su actitud, según ha indicado Moreno, informa Efe.

Curioso y reivindicativo a la vez ha sido la imagen de uno de los dos jueces de la Audiencia Nacional que han secundado la huelga de este histórico 18-F. Eloy Velasco ha colgado durante la mañana un cartel explicativo en la puerta del Juzgado Central de Instrucción número 6 en el que se podía leerse: «No molestar. Juez en huelga». El magistrado añadía en el letrero que, a pesar de secundar los paros, se encontraba «trabajando» en defensa de «la despolitización de la Justicia, la dignidad profesional de los jueces» y una real provisión de medios. Velasco reivindicaba, a propósito, «una Justicia de calidad y no de cantidad».

En Valencia, el contraste lo ha protagonizado una mujer, con una camiseta en la que zarandeaba la imagen impresa de su hijo fallecido, un guardia civil para cuya muerte reclamaba Justicia, mientras el juez decano de Valencia hablaba para los medios sobre las reivindicaciones de los jueces y el seguimiento de la huelga.

Y qué decir de Sevilla, cuyos juzgados llevan varios días siendo el foco de atención de toda España a raíz del «caso Marta del Castillo». La declaración del hermano del presunto asesino de la adolescente sevillana ha coincidido con un caso que ha despertado gran revuelo mediático en Andalucía, por las presuntas facturas falsas que pudo haber emitido el Ayuntamiento que rige Alfredo Sánchez Monteseirín. Además, el juez que despertó la polémica por su presunta negligencia, Rafael Tirado, se ha escondido de las cámaras y objetivos y ha preferido no secundar el paro.

Los lectores, resignadosLos lectores de ABC.es también han dejado patentes su malestar con la situación de paro de la Justicia en el país con testimonios recabados a lo largo de este 18-F. Como el caso de Alicia, en Málaga, que ha indicado que llevan ya un año a la espera de recibir una herencia familiar, pero cuando queda poco tiempo para recibirla, llega una persona, pausa el proceso al presentar una queja, lo que ha agravado la situación en huelga de los jueces, según se recoge en su testimonio. Otros, más resignados, como José María Fernández, de Madrid, comenta que la huelga en poco le afecta, cuando ya acumula un retraso superior a los diez años para obtener una respuesta de un Tribunal Contencioso-Administrativo. «Todo seguirá igual. Deberían hacer una huelga a la japonesa», opina este lector.