La actual ministra de Fomento, la malagueña Magdalena Álvarez, fue la responsable de aceptar la donación del himno por parte de los herederos en este decreto que ella misma propuso como consejera de Economía y Hacienda de la Junta de Andalucía. Ella es quien firma, junto al presidente Manuel Chaves, el texto publicado en el Boletín Oficial andaluz el 10 de agosto de 2002, en el que dispone, «a propuesta de la Consejera de Economía y Hacienda y previa deliberación del Consejo de Gobierno, en reunión celebrada el 9 de julio de 2002», que «la donación objeto de este Decreto será inscrita en el Registro Territorial de la Propiedad Intelectual». Pero Álvarez «olvidó» llevar a cabo lo que ella misma había propuesto y no asentó a nombre de los andaluces esta obra en el Registro -donde sólo aparece una pieza audivisual inscrita por Juan Lebrón-, algo que hubiera servido a la Junta para eludir cualquier responsabilidad.