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Eluana llega a la clínica donde morirá por paro cardíaco dentro de quince días

Los últimos días de vida de la joven italiana, en coma desde hace 17 años, están ya escritos en el protocolo de «actuación de la sentencia de la Corte de Apelación de Milán sobre la voluntad de Eluana Englaro». Este protocolo se puso en funcionamiento ayer, cuando llegó de madrugada en una ambulancia a la clínica «La Quiete» de Údine , donde morirá.

En el texto, firmado por su padre y el equipo de médicos y enfermeras que de forma voluntaria asistirán a la desconexión de esta mujer de 38 años, aparecen descritos todos los pasos hacia su muerte. El documento era uno de los requisitos solicitados por el Tribunal Supremo italiano que en 2008 dio el visto bueno a la voluntad de Beppino Englaro de desconectar las sondas que mantienen a su hija con vida, una vida que se truncó en 1992, cuando con 20 años, su coche resbaló en una placa de hielo chocando contra un árbol y provocándole una hemorragia cerebral que le llevó a un estado vegetativo permanente.

Muerte por paro cardíaco

Siguiendo el protocolo establecido por el equipo médico que se constituyó este lunes en la asociación «Por Eluana» para afrontar mejor las relaciones jurídicas con la clínica, la joven morirá en unos quince días. Durante las primeras tres jornadas, Eluana, de la que ayer se despidieron entre lágrimas las monjas que cuidaron de ella durante más de una década, recibirá los cuidados normales. Para ello, un total de catorce personas, dirigidas por el médico De Monte, quien la acompañó en su último viaje, la asistirán las 24 horas.

Una vez que se confirme la «normalidad» de la situación de la chica italiana, se procederá a la reducción del 50% de la hidratación y la alimentación, eliminando las sondas un día después , mientras que por vía muscular se suministrarán los sedativos necesarios para evitar espasmos de reflejo. «Eluana no sufrirá porque ya está muerta» , explicó en alguna ocasión el doctor De Monte.

«No nos moveremos de aquí», dijo Antonella Vian del Movimiento Ayuda a la Vida, mientras sostenía en una mano la foto de Eluana y en la otra una barra de pan y una botella de agua. «Esto es lo único que le sirve para vivir»

Según los cálculos médicos, la muerte se producirá por paro cardíaco, y siguiendo el protocolo está prevista la autopsia de su cerebro para estudiar el estado del mismo después de tantos años de coma. El protocolo establece, asimismo, que no se podrá entrar con teléfonos móviles y cámaras de fotos en la habitación de Eluana. Para controlar que esto no suceda, dos vigilantes privados están ya apostados junto a la puerta.

Ante la clínica «La Quiete» se están manifestando numerosas asociaciones de defensa de la vida. «No nos moveremos de aquí», señaló a los medios Antonella Vian del Movimiento Ayuda a la Vida , mientras sostenía en una mano la foto de Eluana y en la otra una barra de pan y una botella de agua. «Esto es lo único que le sirve para vivir», dijo entre lágrimas.

A vueltas con el decreto

Desde los sectores católicos se pide con insistencia un decreto del Gobierno para salvar a esta joven , mientras que desde el propio Gobierno surgieron ayer voces de protesta y de pesar porque «han condenado a Eluana a muerte». El presidente del Consejo italiano, Silvio Berlusconi, prefirió ayer no referirse a este polémico tema, al contrario que los líderes de la oposición que se congratularon por el hecho «de que finalmente se cumpla una sentencia justa».

Las esperadas declaraciones del padre de Eluana llegaron al final de la tarde, quien manifestó una vez más su deseo de silencio: «Hasta que no acabe esta historia no hablaré, después se verá si tiene sentido hablar o no».

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