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Así se reparten los créditos del ICO

Así se reparten los créditos del ICO

Pongamos que se llama Pedro y que tiene una empresa mediana del sector tecnológico y que, afortunadamente para él, no ha notado la crisis. Los tiempos duros para la tecnología fueron otros y su empresa logró superarlos. Desde entonces, la prudencia ha sido la marca de la casa en la gestión de su compañía. Sin apenas deudas y con clientes solventes, el negocio marcha viento en popa.

Pedro no necesita créditos del ICO, de esos recién aprobados por el Gobierno por importe de 30.000 millones de euros para mejorar las condiciones del circulante de las pequeñas y medianas empresas pero, curiosamente, su empresa va a ser beneficiaria de uno de esos créditos.

Cuando me explicó la maniobra no le creí. Tanto es así que me la tuvo que volver a explicar. Al finalizar la segunda explicación me pidió que la publicara y eso hago, para escarnio del sector financiero y para alerta del Banco de España y del Gobierno. Señores, así se están repartiendo los créditos del ICO. Lo único que hago es transcribir las palabras de este empresario que supuestamente responde al nombre de Pedro.

«Me llamaron del banco y me dijeron que si había visto lo de los créditos del ICO, pero les dije que ni los necesitaba, gracias a Dios, ni estaban diseñados para ayudar a una empresa como la mía y cuando me explicaron la operativa aluciné. Me contaron que ellos van a coger la parte que les corresponde del pastel y la van a dar en forma de créditos a empresas solventes, es decir, a empresas que sin ninguna duda puedan pagar. El tipo de interés es abonado por el ICO, así que es a coste cero para el titular del crédito. En mi caso, como no necesito el préstamo, lo que hacen es abrirme un depósito, poner en él la cantidad del crédito y pagarme intereses por ello. O sea, dinero a coste cero para mi circulante -es decir, caja y bancos-, que no necesito. El banco cumple con su cometido y al finalizar el plazo del préstamo se deshace el depósito y todos tan contentos. Cuenta con que la mayor parte de los créditos se va a repartir así, porque si me lo han ofrecido a mí, que no soy nadie, no quiero imaginar lo que se está haciendo a otras escalas».

Y digo yo. ¿Todos tan contentos? Pues más bien no. Supongo que quienes realmente necesitan el dinero para reforzar su maltrecho circulante por causa de los impagados generalizados estarán que echan chispas, porque por este método las empresas a las que un refuerzo de circulante les salvaría de la desaparición no van a ver un euro.

Mientras tanto, al Gobierno se le llena la boca hablando de los 30.000 millones que van a salvar a las pymes, pero como dice mi amigo, «poner a repartir el dinero a los bancos es como poner a la zorra a cuidar del rebaño».

En opinión de este empresario, a las empresas que realmente lo necesitan «no van a llegar ni las migajas». Y mientras tanto, el goteo del paro es continuo y amenaza con pasar de goteo a chaparrón.

Evidentemente, mi amigo el empresario no se llama Pedro ni trabaja en el sector tecnológico, pero en nuestra conversación no se habló «del banco», sino que se le nombró en todo momento por su nombre. No lo digo porque me imagino que no es una excepción, pero de verdad que me cuesta no escribrilo.

En nombre propio

Jesús Salazar

PRESIDENTE DE sos cuétara

Se acabó la incertidumbre. Finalmente, el Cola Cao de Nutrexpa absorbe las galletas de Sos Cuétara. Un desayuno completito. Jesús Salazar, presidente de Sos, pretendía vender la división por al menos 300 millones de euros para financiar parte de la compra del negocio aceitero Bertolli, pero la situación no está para tirar cohetes y decir no a una buena oferta hubiese sido poco menos que desaconsejable. En cualquier caso, los 215 millones de euros por lo que finalmente lo ha vendido no es moco de pavo y a Sos le vendrá de perlas, que seguirá con sus desinversiones para financiar su negocio estrella.

Magdalena Álvarez

Ministra de fomento

«Antes partía que doblá». Palabras textuales que goza de decir la ministra «Maleni» cada vez que es puesta contra las cuerdas. Por cierto, una vez sí, y otra también. Y en los últimos tiempos, más que nunca. ¿Conoceremos algún día las oscuras e incomprensibles razones del presidente Zapatero que le impiden prescindir de tal prenda dentro de su Gabinete? Sólo recordarles que esta auténtica experta en caos aéreos, ferroviarios y de transportistas, ha llegado a Madrid como parte de la cuota socialista andaluza que Manuel Chaves le impuso a Zapatero junto a Carmen Calvo, cuyo paso por Cultura también fue para nota.

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