La música de raíces también es regada por las cantantes españolas

Las nuevas voces del folk femenino destacan por su belleza y su aspecto delicadamente femenino. Guitarra en ristre y voz con maýusculas, la generación MySpace marca el rumbo del folk español

23/12/2008
Actualizado a las 21:01h.

Guitarra y voz. Son los dos únicos instrumentos que durante décadas han definido los compases básicos del folk femenino. Junto a ellos, la imagen habitualmente masculina y poco atractiva solía acompañar a solistas como K. D. Lang o Cyndi Lauper. Una imagen que ahora se ha visto dulcemente matizada por la belleza, candidez y feminidad que destilan cuantas mujeres entonan la voz cantante del folk actual. Por una vez (y ojalá sirva de precedente), en España el cambio es más que evidente.

Christina Rosenvinge fue la primera profeta en tierra de nadie que consiguió provocar adicción a cuantos amantes del folk más meloso se acercaban a sus susurrros. «Tu labio superior», su último disco, es la prueba evidente de que la profecía se consumó y graduó con nota. Tras ella (o gracias a ella) ha ido surgiendo toda una generación de jóvenes bellezas armadas de acordes y melodías. Entre ellas Russian Red , la última ninfa del paraíso folkie y ferviente admiradora de la reina Rosenvinge.

Objeto de devoción

« I love your glasses », el primer disco de Lourdes Hernández, es objeto de devoción y adoración en el jukebox social. Pinchado hasta la saciedad por la sociedad del culto a la imagen, esta solista de angelical aspecto ha dejado sin palabras a los que querían ver en ella sólo un objeto decorativo de las listas de éxitos. Si a Russian Red la comparan con Cyndi Lauper (nunca el « Girls just wanna have fun » sonó tan sensual), a Anni B Sweet le sucede lo mismo con la propia Lourdes. Y en este momento no hay nadie mejor con quien se le pueda comparar.

Ya hace más de un año que Ana Lopez (así se llama Anni B Sweet ) abandonó su Málaga natal y recaló en Madrid. Una vez en la capital, letras en inglés mediante, y acompañada de Javier Doria (The Melocotons) y Brian Hunt (un nexo más con Russian Red, pues éste fue guitarrista de Lourdes), Anni B Sweet comenzó el protocolario desfile por las salas de conciertos. Desfile que se vio felizmente interrumpido cuando su maqueta (hay que reconocer que es muy«Russian», a los oídos me remito) resultó ganadora del concurso organizado por Arindelle Records . ¿El resultado? El primer disco de Anni B Sweet será publicado por Subterfuge en la primavera de 2009. Una belleza principiante que se suma a la constelación de damas folkies.

Y es que constelación es el mejor término para definir una lista de la que Lidia Damunt lleva formando parte «toda una vida», que diría la canción. Con su aspecto de sobria rebeldía y ataviada con su guitarra, su armónica y su pandereta en el tobillo, la murciana dejó atrás el grupo de culto Hello Cuca para aventurarse «En la isla de las bufandas» (Subterfuge). Su primer trabajo en solitario ha supuesto la consagración de una artista que le canta en castellano a Johny Cash, aunque bien podría ser la June Carter española («Soy Tormina» obligaría a quitarse el sombrero al mismísimo Hank Williams). En febrero se mete de nuevo en el estudio de grabación para preparar un disco que pormete tendrá«mucha más madera».

Alumnas aventajadas

Lidia comparte pupitre de aventajada alumna folk en Subterfuge con Tulsa , el grupo que lidera la guipuzcuana Miren Iza . Tan aventajada que en 2007 su álbum «Sólo me has rozado» fue nominado a los Grammy Latinos en la categoría de Artista Revelación. Miren despliega en castellano sus partituras rockeras, con influencias tan evidentes como Nacho Vegas o Christina Rosenvinge (la profeta sigue coleccionando discípulas). Embarcada en un nuevo proyecto, a Miren se la ve con ganas de seguir confirmando que no es «Estúpida», como reza uno de sus temas más conocidos, y lo demostrará el próximo 3 de febrero en la madrileña Sala Boite junto a Anni B Sweet.

Como Tulsa y Lidia Damunt, Aroah también canta (salvo la excepción que supuso «The last laugh», en 2004) en castellano. El suyo es un caso particularmente tímido, la misma timidez que Irene Tremblay transmite en las distancias cortas. «El día después» (Acuarela) fue su última comparecencia pública y de cara al futuro más próximo Aroah está metida de lleno en un original proyecto de cómic musical por lo que las referencias a Cat Power tendrán que renovarse.

Chan Marshall es al estilo de Aroah lo mismo que PJ Harvey al de Ainara LeGardon . Aunque tendremos que esperar unos meses para volver a escuchar a Ainara por culpa de una convalecencia (ojalá sea una retirada tan creativa como la que supuso la gestación de «Micah P. Hinson and the Opera Circuit» para el músico estadounidense), «Each day a lie», su segundo álbum autoeditado en su propia discográfica,Winslow Lab, recuerda poderosamente al«White Chalk» de Harvey.

Pero no únicamente de solistas vive el folk español. Grupos como Boat Beam , que publicarán su primer disco con claras reminiscencias a las neoyorquinas Au Revoir Simone en abril del año próximo, o (colegas, por cierto, vía MySpace de su admirado Iron & Wine) dan buena cuenta de la revolución que se está gestando. Y es que el folk nunca fue tan bello.