La primera misión naval de la historia de la UE llegará a Somalia en diciembre
La Unión Europea espera poder lanzar su primera misión naval a primeros de diciembre. La operación antipiratería en Somalia, bautizada como Eunavfor, partirá con un número todavía no determinado de barcos para estar en las aguas somalíes antes de final de año. La misión estará al mando del vice-almirante británico Philip Jones, que la dirigirá desde el cuartel general en la base también británica de Northwood, y el mando de la flota en el teatro de operaciones se tendrá que definir cuando se conozca la composición de la misma y la contribución de cada país.
Los ministros de Exteriores deberán dar su luz verde definitiva en el consejo del próximo 11 de noviembre, mientras los técnicos del Consejo Europeo preparan la base jurídica de esta primera operación naval con bandera europea. Se espera que, en una semana, se anuncie la «acción común» aprobada por todos los países y unos días más tarde se empezará a conocer el Plan Operativo de la Eunavfor.
La puesta en marcha de esta misión significará a su vez que la célula de coordinación que se había formado en Bruselas, al mando del capitán de Corbeta, Andrés Breijo, quedará disuelta en cuanto esté en marcha la operación. En Bruselas se da por hecho que Breijo pasaría a ejercer el mando del Buque de Proyección Estratégica Juan Carlos I, uno de los barcos más modernos de la Armada española y una de las unidades en teoría candidatas a incorporarse a la misión.
«Menos de diez, más de cinco»
No se sabe todavía qué participación tendrá España en la misión, aunque fuentes diplomáticas europeas cuentan con que, en un primer momento, hará valer el hecho de que cuenta con dos aviones de patrulla en la zona. En la reunión informal de ministros de Defensa europeos de Deauville, una decena de países se manifestaron dispuestos a enviar buques de guerra a la zona, o a colaborar en la misión, de manera que los diseñadores de la misión están barajando una dimensión según la siguiente fórmula: «menos de diez pero más de cinco» barcos.
Por el momento, la costa de Somalia está siendo patrullada por una flotilla de la OTAN que ha aceptado asumir este trabajo mientras se pone en marcha el pesado mecanismo europeo.El almirante norteamericano que la dirije, Mark Fitzgerald, declaró ayer en Londres que por el momento no existen reglas para esa misión, a falta de directivas políticas por parte del Consejo Atlántico: «los piratas actúan con ventaja, porque uno no sabe que es un pirata hasta que ha atacado a un barco».
Por parte europea, las reglas de enfrentamiento tampoco se han empezado a discutir. La operación está muy lejos de estos tecnicismos, pero lo más probable es que la mayoría de países tengan que alinearse con las posiciones de los más restrictivos en este campo. La OTAN dispone de medios más sofisticados para llevar a cabo estas misiones, pero tanto la Alianza como la Unión Europea tienen que conformarse con que algunos países limitan la capacidad de acción de sus militares en el exterior.
Se considera prácticamente seguro que países como Francia y Alemania enviarán buques a la misión. Gran Bretaña y Holanda es muy probable que también. Otros países podrían contribuir con fuerzas de asalto embarcadas en navíos de otros países, de manera que no se excluye ninguna contribución, ni siquiera de países europeos que carecen de fuerzas navales propias porque no tienen costa. La misión está apoyada en dos resoluciones de la ONU, que ha pedido protección para sus envíos de alimentos para la población civil y pretende ejercer un efecto dosuasorio hacia los piratas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete