Solbes «castiga» a pagar el déficit local a los madrileños

10/09/2008 a las 08:46h.

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, cree que «el déficit del Ayuntamiento de Madrid tienen que pagarlo los madrileños». Así lo manifestó ayer, en una postura que suena a «castigo» y que desde luego tiene poco que ver con la que han mantenido diferentes responsables federales de su partido durante el congreso regional socialista de este fin de semana, donde tanto Rodríguez Zapatero como José Blanco han hecho una encarecida defensa de Madrid y los madrileños.

Las palabras de Solbes, en declaraciones a la cadena Ser, respondían a la petición del alcalde Ruiz-Gallardón de más recursos para los ayuntamientos, para que puedan atender todos los servicios que proporcionan a los ciudadanos.

Fallos de cálculo

A ello contestó el responsable económico del Gobierno central asegurando que el alcalde madrileño «ha emprendido una serie de actuaciones y de obras, entre otras las de la M-30, que según sus cálculos y el plan de financiación que nos presentó llevaría un déficit de 500 millones de euros, y tiene un déficit de 1.500 millones. ¿Lo deben pagar el resto de los españoles? Yo creo que lo deben pagar los madrileños que le han elegido», replicó.

Solbes añadió que la financiación local está vinculada al porcentaje de ingresos del Estado y que, si éste es menor, «lógicamente» también será inferior para los ayuntamientos.

Línea «oficial»

Sus palabras contrastan con la línea seguida durante todo el fin de semana, en el Congreso socialista de Madrid, por los diferentes responsables de la ejecutiva federal del PSOE que participaron en el mismo. Todos ellos insistieron en sus discursos en recalcar el valor que Madrid y los madrileños tenían para los socialistas, y apostaban por reconquistar a estos ciudadanos, que según los ideólogos del PSOE, estaban deseosos de votarles.

Así, el vicesecretario general de los socialistas españoles, José Blanco, dijo que tenía el encargo de Rodríguez Zapatero de «dedicarle mucho tiempo a Madrid», y aseguró que había en esta región «mucha gente que quiere votarnos y desea que les demos razones para ello».

También apuntó Blanco que los madrileños necesitan «un PSOE fuerte que sea cómplice de ellos», y «un gobierno que erradique las trincheras que ha traído Esperanza Aguirre». Igualmente, enfrentó los dos modelos políticos que existen en momentos de crisis: «El sálvese quien pueda o los que creemos en arrimar el hombro». Mensajes todos que chocan con el «que paguen los madrileños» que propugnó Solbes, que por otro lado también podría ser contraproducente para la consecución de otro de los objetivos anunciados por Tomás Gómez, secretario de los socialistas madrileños: «Hay que reconquistar la mayoría social en la Comunidad».

Cortina de humo

Desde el Ayuntamiento madrileño, rebatió a Solbes el concejal de Hacienda, Juan Bravo. Siguiendo el razonamiento del vicepresidente económico, se preguntó si «es reprobable» que el Ejecutivo central partiera de una situación de superávit y ahora tenga un déficit de más de 10.000 millones de euros.

A su juicio, las declaraciones de Solbes son «una cortina de humo ante el verdadero debate sobre el déficit estructural en las haciendas locales». Bravo recordó que el soterramiento de la M-30 es un equipamiento público y que en el futuro el espacio liberado se convertirá en un corredor verde.