Rajoy ve al Gobierno «antiguo y dividido» y al presidente, «desorientado»

16/08/2008 a las 02:53h.

S. E.

MADRID. «Estamos ante un Gobierno agotado y antiguo, que además está dividido, con un área económica claramente superada y con un presidente desorientado». Éste es el diagnóstico de la situación política que hizo ayer el presidente del PP, Mariano Rajoy, en una entrevista a Europa Press.

Según Rajoy, el Gobierno se ha limitado en estos meses a dar «palos de ciego» ante la «galopante» crisis económica, y ha mostrado una «incapacidad absoluta» para presentar un paquete de medidas que transmitan confianza y generen credibilidad.

El líder de la oposición cree que el Gobierno socialista ha demostrado «una total y absoluta falta de reflejos» ante la actual coyuntura económica. «Yo creo que por este camino vamos mal», alertó. Tras acusar al jefe del Ejecutivo de haber «engañado» a los españoles negando la crisis durante meses, recordó que un año después de que aparecieran los primeros síntomas de lo que podría suceder por la crisis hipotecaria en Estados Unidos, el gabinete de Zapatero «sigue sin tomar medidas económicas de calado». «El área económica del Gobierno ha estado parada y además ha estado en disputa constante. Así es imposible generar confianza alguna», aseveró.

«Es sorprendente, pero en cuatro meses lo que está transmitiendo el Gobierno es agotamiento y está generando mucha desconfianza en el conjunto de la sociedad española, que necesita un mensaje de esperanza y que le diga que se va a salir de la crisis, pero para eso hay que tomar medidas y gobernar», comentó Rajoy.

El presidente nacional del PP anunció que su grupo parlamentario someterá a debate en el Congreso a partir de septiembre las recetas que ha propuesto para salir de la crisis. «Plantearemos el debate una a una, para que el Gobierno diga por qué no las acepta, pero desde luego la oposición ha cumplido con su obligación, ha hecho propuestas y le ha ofrecido su colaboración», insistió.

En la misma entrevista, Rajoy se pronunció sobre la energía nuclear y apostó por abrir un debate en España, máxime cuando el Gobierno socialista «no ha planteado ninguna alternativa». «Al menos hay que plantearlo, porque si no, la dependencia energética será aún mayor en España».